Trabajadores denuncian que la UTE de la antigua Sogarisa quiere despedir a 13 empleados y cambiar el convenio

El comité de la planta de As Somozas (A Coruña) censura que el trabajo "no se realiza en las condiciones de seguridad exigidas"

El comité de la unión temporal de empresas que gestiona el Centro de Tratamiento de Residuos Industriales de Galicia (UTE PMA-Conteco, antigua Sogarisa) ha denunciado que la dirección de este complejo, situado en As Somozas (A Coruña), les ha trasladado su intención de aplicar un ERE de extinción que afectaría a 13 trabajadores.

Así lo ha denunciado el comité de empresa en un comunicado, en el que critica que desde que la nueva entidad se hizo cargo de las instalaciones, "los despidos, sanciones y recortes de derechos a los trabajadores se han vuelto constantes".

En concreto, explica que en diciembre de 2016 se produjo un primer despido, al que le siguió otro en enero de 2017. Este fue el paso previo para trasladarles a los representantes de los trabajadores el anuncio, el pasado 1 de febrero, de que se iniciaba un expediente de regulación de empleo por "causas organizativas, que afectaría a 13 trabajadores". Además, también les informó de la denuncia de un pacto de empresa y del convenio colectivo aplicados durante casi 20 años.

Desde la parte social se estima que objetivo de la sociedad es "acogerse a un convenio colectivo mucho menos favorable para los trabajadores, como es el de reciclaje de residuos, y subcontratar muchas de las actividades de producción de la empresa".

MEDIDAS DE SEGURIDAD
Asimismo, el comité de empresa de esta UTE ha asegurado que el trabajo "no se realiza en las condiciones de seguridad exigidas para una instalación de estas características lo que provocó que, recientemente, se hayan producido varios incidentes graves".

En este sentido, se ha referido al "derrumbe de una nave de mezcla" en la que "diariamente se encuentra un maquinista efectuando los tratamientos necesarios a los residuos". También ha citado el incendio de otra nave de 3.000 metros cuadrados así como otro fuego en un foso de mezcla que quemó una máquina retroexcavadora. "Los incendios ya se han convertido en algo habitual durante la jornada de trabajo y parece no importar a la dirección de la empresa", señala.

ADMINISTRACIONES
Ante este contexto, los representantes sindicales han criticado la actitud de las administraciones, tanto de la Xunta como del Ayuntamiento de As Somozas. En concreto, censuran que pese a que les informaron de la situación "nadie parece tener responsabilidad en ninguno de estos temas".

De este modo, en el caso de la Administración autonómica critican que se otorgase la concesión de unas instalaciones que son de su propiedad sin que "parezca importarle el uso que la concesionaria" hace de las mismas", "obviando su labor de control e inspección mientras sigue percibiendo su canon anual".

Por su parte, sobre la administración local que presidente Juan Alonso Tembrás (PP), asegura que le trasladado a los trabajadores que el Ayuntamiento "no tiene responsabilidades sobre las empresas privadas que ocupan su polígono". "Están pasando por algo sus obligaciones y responsabilidades ambientales respecto a las mismas cuando, curiosamente, también perciben un canon anual del 5% de la facturación total".

Ante esta situación, el comité de empresa asegura que está dispuesto "a llevar a cabo las acciones que legalmente estimen oportunas con el objetivo de preservar la seguridad y salud de todos los trabajadores" y también "el cuidado del medio ambiente y evitar los despidos y recortes de derechos laborales impuestos por la empresa".

INSTALACIONES
Las instalaciones de la antigua Sogarisa, que se encuentra en proceso de disolución, se encuentran ahora gestionadas por la UTE PMA-Conteco, en donde la mayoría del accionariado está gestionado por los herederos del empresario fallecido Epifanio Campo.

Este centro, creado a mediados de la década de los 90 en el municipio de Ferrolterra por la Xunta, fue concebido para tratar los residuos peligros de la industria de Galicia, aunque en los últimos años la mayoría de ellos llegan procedentes de otras comunidades, como Andalucía.

En este centro también se trató buena parte del fuel del petrolero Prestige aunque, según ha podido saber Europa Press, mucho de este residuo continúa todavía a día de hoy confinado y almacenado en una nave del depósito de Marbán. La plantilla actual es de unas 60 personas.