Uno de siete acusados de tráfico de drogas admite su culpabilidad en un juicio en Ourense

Un acusado de un total de siete ha admitido ante la Sala de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ourense haber participado en una operación de tráfico de cocaína, delito por el cual están todos ellos procesados. La Fiscalía pide penas que oscilan entre los seis años y cuatro meses y los cuatro años de cárcel.

El acusado en cuestión, que solo ha contestado a las preguntas de su abogado y del fiscal, ha reconocido que otro de los procesados le dijo "si podía conseguirle algo para consumir", es decir, "cocaína", y ha declarado que utilizaban lenguaje en clave para desarrollar el negocio.

Asimismo, ha afirmado que le entregó al otro acusado en la vivienda de éste un total de 10 gramos de cocaína, por los que recibió 350 euros. En relación a los 149 gramos hallados en el registro de su vivienda, ha asegurado que esta sustancia estupefaciente, destinada "al consumo propio", se la había dado otro acusado para que la guardara.

Mientras, tres de los acusados han declarado que su única vinculación con la droga se limitaba al consumo propio, mientras que otros dos se han limitado a negar implicación alguna con el tráfico de sustancias estupefacientes, delito que les atribuye el Ministerio Fiscal. El séptimo se ha acogido a su derecho a no declarar.

ENTREGA VOLUNTARIA DE COCAÍNA
Uno de los acusados ha declarado que, tras ser detenido por las fuerzas de seguridad, le entregó a los agentes "voluntariamente menos de siete gramos de cocaína con una pureza del 19 por ciento", lo que supone, en definitiva, "algo más de un gramo", ha concretado.

En este sentido, ha destacado que, en el momento de su "primera y única detención", llevaba consigo "todo lo que tenía", esto es, "el sueldo, dinero para pagar el alquiler, "pen drives", dos imanes y tres móviles", y, tras quedar en libertad, fue acogido en la vivienda de otro de los acusados.

Además, ha asegurado que se introdujo en el consumo de cocaína "tras dejarse con una pareja con la que llevaba mucho tiempo" y entrar en "depresión". "Conocía a mucha gente de la droga al trabajar en la noche. No ganaba dinero con la cocaína", ha añadido.

Por otro lado, dos de los acusados han destacado que las conversaciones telefónicas en las que se hablaba de "coches y piezas" no hacían referencia a compra venta de sustancias estupefacientes, sino a negocios relacionados con un taller de vehículos.

SOLICITUD DE NULIDAD DE AUTOS
El letrado de uno de los procesados ha solicitado en las cuestiones previas la nulidad de varios autos y ha expuesto una posible vulneración del derecho al secreto de las comunicaciones hacia su cliente a raíz de las escuchas telefónicas.

Asimismo, ha lamentado haber recibido "solo un 15 por ciento de las intervenciones" realizadas a su patrocinado y ha señalado que relacionar el nombre de "Pepón" que aparece en las anotaciones de compra venta con su cliente carece de fundamento "en base a hechos objetivos", por lo que es una "suposición" o "hipótesis".

La nulidad de varios autos y de las intervenciones telefónicas también ha sido demandada por otros letrados de la defensa, así como un posible caso de dilaciones indebidas --señalado por parte de uno de ellos--. Todos ellos solicitan para sus patrocinados la libre absolución.

El Ministerio Fiscal acusa a los siete de un delito contra la salud pública y pide para dos de ellos una pena de prisión de seis años y cuatro meses y, para cinco de ellos, una condena de privación de libertad de cuatro años.

Según señala el fiscal en su escrito de acusación, los agentes comenzaron a investigar a los sospechosos tras decomisarle a uno de ellos documentos en los que se especificaban las transacciones que llevaban a cabo relacionadas con la venta de sustancias estupefacientes.

El juicio está señalado para el próximo martes y miércoles a las 10,00 horas en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ourense.