El SERGAS reconoce una "ralentización puntual" en Urgencias y culpa a una avalancha "inusual" de pacientes

La Xunta reacciona a las críticas y a las fotos que muestran los pasillos de urgencias saturados d en el Complejo Hospitalario Universitario (CHUS) de Santiago. En su opinión, la asistencia sanitaria sigue siendo "de calidad y adecuada", pese a admitir un problema "puntual".

Fue a las 15 horas del miércoles cuando se produjo una "circunstancia totalmente inusual", cuando entraron en urgencias 80 pacientes nuevos "coincidiendo con el cambio de turno del personal".  Ante esto la Xunta reconoce una "ralentización puntual en la atención a los enfermos que tenían que ser atendidos en la zona de boxes".

Según la plataforma de pacientes del CHUS, hubo enfermos esperaron más de una hora a que les hicieran el triaje, para clasificar su gravedad.Este colectivo cifra en 29 los enfermos que llegaron a acumularse en camillas y sillas de ruedas en los pasillos. 

En Marea se hizo eco de este problema denunciando "la mala gestión de la Atención Primaria por parte del Servizo Galego de Saúde (Sergas) y la negativa a abrir otros espacios para atender los picos de atención".

Desde el SERGAS se responde negando que falte personal y camas porque "todos los espacios de urgencias están habilitados" y había "un refuerzo de personal de enfermería de hasta cinco profesionales por turno". Además, argumenta que "los enfermos graves no esperan" al ser atendidos en la zona de críticos, donde había sitio libre.

La Gerencia de Santiago de Compostela señala también además que, salvo picos puntuales, está acudiendo menos gentes que las pasadas navidades. El departamento que dirige Eloína Nuñez, prima del presidente de la Xunta, indica  que "había huecos libres" en otros departamentos de urgencias  mientras había camillas en los pasillos.

MANIFESTACIÓN EL DÍA 9

La polémica salta a días de la manifestación en apoyo a las urgencias del CHUS convocada para el día 9. Las urgencias santiaguesas acumulan ya ocho semanas de huelga. Aunque hay servicios mínimos del 100%, el paro limita por ejemplo las horas extras. Por ahora y pese al diálogo, el conflicto sigue abierto.