Funcionarios de Teixeiro (A Coruña) niegan supuestas agresiones a un preso, que atribuyen a una "invención"

Fiscalía acusa a tres de ellos, mientras que el letrado del interno imputa a seis

Funcionarios de la cárcel de Teixeiro (A Coruña), acusados de agresiones a un preso en 2012, han negado los hechos que se les imputan, limitando su actuación a una reducción del interno tras un comportamiento violento el 26 de mayo de hace siete años.

Uno de ellos, el que sufrió, a su vez, una agresión por parte del preso y que le provocó lesiones en una mano --motivo por el que ejerce la acusación contra el interno, que a su vez acusa a los seis funcionarios que se sientan en el banquillo de los acusados--, ha atribuido a una "invención" las supuestas agresiones.

"Se inicia todo esto -ha dicho sobre las acciones legales del preso contra los funcionarios-- una vez que es conocedeor de mi propia denuncia y de las consecuencias", ha explicado en la primera sesión del juicio, celebrado en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña, donde la vista se retomará la próxima semana.

Antes, en su declaración, explicó, como han hecho otros funcionarios que intervinieron en los hechos del día 26 de mayo, que al interno lo trasladaron, junto a su hermano, al cuarto del educador, donde se realizan los cacheos, tras un incidente relacionado con el tabaco.

Ante el tribunal, este funcionario, que sufrió lesiones en una mano por una patada del interno, según relató, ha explicado que en todo momento el preso se mostró "agresivo". "Y su agresividad dio paso a la violencia física", ha dicho en coincidencia con el testimonio de los otros dos compañeros que estaban con él y para los que la Fiscalía pide, inicialmente, penas de prisión por un delito de lesiones al preso.

NIEGAN MUTUAMENTE LAS AGRESIONES
Los tres negaron, a preguntas de sus respectivos letrados y de la Fiscalía, haber golpeado al hombre y sí admitieron que lo redujeron debido a su comportamiento. "Se empleó la fuerza mínima e indispensable", ha añadido uno de ellos.

También han indicado que, en el traslado del interno a Enfermería, atendiendo al protocolo existente en estos casos, el hombre no se quejó de dolores, han dicho ante las preguntas de la Fiscalía sobre un informe médico que apuntaba a la existencia de una contusión en la rodilla y otra dorsal, en contraposición a un primer informe, realizado tras los hechos, que no recogía ningún problema médico.

Frente al testimonio de los funcionarios, el interno ha asegurado que se intentó defender tras recibir "un puñetazo", pero negó haber dado patadas. "Como reaccioné en ese momento, no lo sé", expuso en otro momento de su declaración. "Me llevaron para ingresos a golpes", ha dicho, algo rechazado por los otros acusados quienes han expuesto que era un espacio que no estaba cerrado y en el que había cámaras.

Por otra parte, ha asegurado, en referencia a los otros funcionarios a los que no acusa Fiscalía, que al día siguiente uno de ellos le hizo firmar un papel y le pegó una bofetada. "Otro me piso la cabeza", ha expuesto a preguntas de su letrado, ante quien explicó que hasta el 9 de junio no se le envió al hospital, donde fue intervenido.

PENAS
En su escrito de calificación, el Ministerio Público sostiene que los tres funcionarios a los que acusa condujeron al preso al despacho del educador, en donde supuestamente le propinaron una paliza con "puñetazos y patadas en el abdomen".

Por estos hechos, Fiscalía pide para cada uno de los funcionarios una pena de cuatro años y tres meses de cárcel por delitos de lesiones. Asimismo, la petición de prisión para el recluso es de tres años por un delito de atentado y lesiones con la agravante de reincidencia. Las defensas piden la absolución de sus clientes, mientras que el abogado del funcionario lesionado en la mano pide la condena también del interno.