Galicia perdió más de 70.000 personas activas en la última década y el CES urge medidas, con especial atención a jóvenes

El peso de los asalariados gallegos sobre el PIB cae casi cinco puntos en 10 años hasta solo suponer el 42,4%

Galicia perdió un total de 71.300 personas activas entre 2008 y 2018, con especial incidencia entre los más jóvenes. Supone un ritmo de reducción (-5,4%) que quintuplica el descenso medio del Estado (-1,1%).

Esta es "una de las principales prioridades" sobre las que llama a actuar el Consello Económico e Social (CES) en su memoria de 2018 presentada este viernes, en la que urge medidas para frenar la pérdida de población activa.

Y es que en 2018 se acrecentó esta tendencia de caída de población activa, con 4.800 personas menos (-0,4%). De este modo, Galicia cuenta con la segunda tasa de actividad (porcentaje de población activa entre población total) más baja del Estado, con un 53,3%, solo con peores datos en Asturias (50,8%).

Al respecto, el CES alerta en su informe de que la problemática es "especialmente intensa" entre los 25 y los 34 años. La cifra de hogares gallegos con ningún activo es casi un tercio (el 31,8%).

Así, el Consello Económico e Social observa un "preocupante y continuo" descenso del peso de los asalariados gallegos en el Producto Interior Bruto (PIB) con un retroceso de 4,5 puntos entre 2008 y 2018, al pasar de suponer el 46,9% al 42,4%.

A la hora de tomar medidas de futuro, se llama a la "articulación" de propuestas para la retención de talento y atraer a jóvenes a la Comunidad. La apuesta por la economía circular y la reorentación del modelo hacia "parámetros más ecológicos" pueden "constituir un nuevo motor de crecimiento". Asimismo, se aboga por activar la reindustrialización y por la profesionalización y desestacionalización del turismo.

SITUACIÓN "PREOCUPANTE"
Olga Crespo, de UGT Galicia, ha sido la encargada de desgranar en rueda de prensa en Santiago las principales conclusiones de este estudio de 2018, en el que ya se observan factores de "desaceleración" de la economía gallega, como un menor crecimiento.

En la presentación, el nuevo presidente del CES, Agustín Hernández, ha señalado que la situación es "preocupante" con base en los datos analizados de 2018, que se "están confirmando" en los primeros trimestres de 2019, en un momento de "incertidumbre".

Aquí juega un papel fundamental el envejecimiento de la población, con una "falta de releveo generacional", reflexiona Hernández, en un declive demográfico que afecta en especial al rural, por lo que cree que se deben favorecer las medidas para su revitalización.

Desde 2008, Galicia perdió 85.294 habitantes, un 3,1% menos del total. Es la tercera comunidad con mayor bajada de población en la última década.

OTRAS CUESTIONES
Entre otras recomendaciones que hace el CES en su informe, se apunta la necesidad de implantar una tarifa eléctrica industrial para grandes consumidores ante la crisis que vive el sector.

Además, se llama a dar cobertura a los más de 7.800 dependientes que siguen sin ser atendidos; se critica que no se reduzca la tasa "constante" del 20% de población en riesgo de pobreza; al tiempo que se apunta la "necesidad" de poner en marcha un plan gallego de salud mental, con atención a menores y perspectiva de género.

También se aboga por promover la rehabilitación de viviendas; reducir la brecha de género entre los pensionistas gallegos; aumentar la inversión en I+D; así como reducir la tasa de abandono escolar, que se encuentra por encima de los objetivos marcados por la UE.