Expertos destacan la importancia de que las empresas tengan un protocolo de protección de las trabajadoras embarazadas

La Xunta inicia una campaña para dar a conocer a empresarios y empleadas las obligaciones y derechos en esta materia

La importancia de que las empresas cuenten con un protocolo por escrito que aclare los "pasos a seguir" cuando una de las trabajadoras se queda embarazada o tiene un bebé lactante, así como la evaluación de riesgos específicos, es una de las recomendaciones que incluye la nueva campaña lanzada por la Xunta para dar a conocer a empresarios y trabajadoras las obligaciones y derechos en esta materia.

Bajo el lema 'Mírelo por onde o mires... todo suma', la iniciativa difundirá folletos y baners para concienciar al sector empresarial de que durante el embarazo y primeros meses del bebé "existen algunos riesgos específicos en el medio laboral" que deben valorarse.

La secretaria xeral de Emprego, Covadonga Toca, ha participado este jueves en una presentación de esta nueva campaña a agentes implicados en la seguridad y la salud en el trabajo, ante quienes ha apostado por "sensibilizar a las empresas" en la mejora de las condiciones laborales para las mujeres embarazadas o madres recientes.

La campaña de la Xunta, aunque recuerda que el embarazo "no es una enfermedad", incide en que existen "condiciones" laborales que "pueden resultar peligrosas para las futuras madres o para el bebé".

Por ello, intentarán "informar, formar, concienciar y sensibilizar" a las empresas y a los empresarios sobre el necesario trabajo de evaluación de riesgos orientado a estas cuestiones, dado que la maternidad es una situación que "implica a toda la sociedad".

EVALUACIÓN INICIAL
Los expertos en la materia inciden en que la necesaria evaluación de riesgos de las empresas debe incluir la perspectiva de la maternidad, de modo que ya esté contemplada esta posibilidad antes de que se dé un embarazo entre las trabajadoras.

Del mismo modo, destacan los beneficios de que exista un protocolo por escrito de los "pasos a dar" en cuanto se produce un embarazo en la plantilla, con el objetivo de que se activen cuanto antes las medidas de adaptación y protección.

"Si hay una evaluación inicial de riesgos y un listado de puestos exentos, puede entrar en marcha desde el primer momento", explican los expertos, lo que llevaría a una actuación más "ágil". "Que exista un protocolo sencillo, que las mujeres sepan con quien tienen que ponerse en comunicación y qué pasos dar en un clima de confianza", ha destacado Manuel López, de Quirón Prevención.

A mayores, cuando la mujer comunica a la empresa su situación, debe existir una evaluación adicional y, en caso de haber un riesgo, adaptar sus condiciones de trabajo o realizar un cambio de puesto. "Es necesario que la empresa incentive que las mujeres cumplan sus derechos", destacan los expertos que, no obstante, inciden en que debe evitarse "que se vaya al último paso directamente", la suspensión del trabajo por riesgo, fomentando que "se trabaje en un entorno seguro".