Fiscal rebaja a 5 años la petición de condena para un estradense por intentar matar a su exjefe con un hacha

La Fiscalía ha rebajado de ocho a cinco años la solicitud de condena para un vecino del municipio pontevedrés de A Estrada acusado de intentar matar a su exjefe golpeándolo con un hacha de modo "sorpresivo y sin capacidad de reacción".

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha dejado visto para sentencia este juicio por un delito de homicidio en grado de tentativa contra Erundino P.M..

El Ministerio Público también ha solicitado que se le imponga la prohibición de acercarse al agredido a una distancia "en ningún caso inferior a los 200 metros" a cualquier lugar en el que se encuentre, por el tiempo de 13 años, así como la prohibición de comunicarse con este vecino a través de cualquier medio durante este mismo período. Además, la Fiscalía ha reclama 36.385 euros como indemnización en materia de responsabilidad civil.

En la vista oral el acusado ha asegurado no saber lo que ocurrió aquel día. "Se me nubló la vista, no sé lo que pasó", ha declarado. También ha recordado que confesó ante la Guardia Civil que había tenido un incidente con su exjefe.

HECHOS
Los hechos juzgados tuvieron lugar el 8 de diciembre de 2015 en el aparcamiento de un bar de la parroquia de Arnois, en el municipio de A Estrada, donde se había citado el acusado con su ex jefe.

La víctima ha explicado al tribunal que se aproximó a la furgoneta del acusado para preguntarle por qué le estaba enviando mensajes de whatsapps insultantes desde que, días antes, habían roto su relación laboral.

Entonces el acusado salió del vehículo con un hacha con la que golpeó al otro hombre. El arma tenía un filo de 10 centímetros y un mango de 68 centímetros. El hachazo asestado le alcanzó a la víctima en un brazo cuando trataba de proteger su cabeza y cara del golpe.

A consecuencia de este ataque, al agredido le quedaron diversas secuelas que "lo incapacitan de modo permanente para el ejercicio de su profesión habitual de maderero", han puesto de manifiesto.

Por su parte, la defensa entiende que el acusado solo debe responder por un delito de lesiones, con atenuantes por haber confesado los hechos.