Un váter en plena calle contra la 'Ley Mordaza'

El Observatório para a Defensa dos Direitos e Libertades (Esculca) ha colocado este sábado en la Praza do Toural, en Santiago de Compostela, un váter público simbólico en defensa de la libertad de expresión y en contra de la Ley de Seguridad Ciudadana de 2015, conocida como 'Ley Mordaza'.

Esta acción consiste en una puerta simulando la entrada a un WC público que cualquier ciudadano puede cruzar para después escribir cualquier idea en un gran rollo de papel que se encuentra detrás. Junto a esto se sitúan imágenes y frases de la poeta Rosalía de Castro, el expresidente Mariano Rajoy y el rapero Valtònyc --huido de la justicia española en Bélgica--, entre otros personajes.

Se trata de una iniciativa que Esculca tenía pensada para el pasado 21 de septiembre, pero que tuvo que ser suspendida por el mal tiempo. Ha contado con la presentación de la actriz Isabel Risco y la música del artista O Leo Arremecághona.

Junto a este váter simbólico se ha repartido un panfleto en el que se critica la 'Ley Mordaza' y la reforma del Código Penal que conllevó por ser "el mecanismo idóneo para castigar conductas que no pueden ser criminalizadas por la vía penal y, ya ahora, aprovechar para llenar los cofres del Estado".

Según cifras de Esculca, la Ley de Seguridad Ciudadana puso en Galicia, hasta diciembre de 2017, 34.545 multas que, en total, suman más de 18,7 millones de euros.

"SIMPLES OPINIONES"
Para el Observatorio para a Defensa dos Direitos e Libertades, esta norma permite "penalizar como enaltecimiento del terrorismo o incitación al odio simples opiniones" y "como desobediencia, ofensa a los sentimientos religiosos o injurias a la sopreprotegida familia Borbón" lo que es el "más básico ejercicio de la libertad de expresión".

Como consecuencia de la 'Ley Mordaza' y la reforma del Código Penal, conductas de "enaltecimiento del franquismo son exhibidas sin problemas en muchos estadios" deportivos mientras que "estreleiras, ikurriñas, esteladas, tricolores, banderas anarquistas o casi anarquistas, camisetas amarillas, bufandas celtarras, insignias del Reino Suevo... son confiscadas con argumentos cínicos".

Además, según el manifiesto de Esculca, las personas que las llevan son "amenazadas, multadas o impedidas de entrar en recintos deportivos durante meses".

"Y todo esto a pesar de las sentencias judiciales, las resoluciones del Defensor del Pueblo y el dictamen de organismos internacionales en que se reconoce explícitamente que el derecho a la libertad de expresión ampara la exhibición de estos símbolos", señala el colectivo.