Santiago inicia una campaña para concienciar contra la explotación sexual y difundir los recursos municipales

El programa Vagalume asistió el año pasado en Compostela a 51 mujeres y consiguió que 35 "se encaminasen al abandono de la explotación sexual"

Aprovechando la celebración este viernes del Día contra la Trata, el Ayuntamiento de Santiago pondrá en marcha una campaña específica para concienciar sobre la lucha contra la explotación sexual y para difundir los recursos municipales de los que disponen las víctimas.

Así lo ha explicado la concejala de Igualdad de Santiago, Noa Díaz, que ha presentado la campaña que se desarrollará bajo el lema 'Si compras sexo, no vales nada'.

En rueda de prensa, la edil ha asegurado que la trata afecta en todo el mundo a 24 millones de personas y que este "vergonzoso delito" es, además, el tercer negocio "más lucrativo del planeta", tras el tráfico de armas y de drogas.

Frente a ello, y para buscar la concienciación social, el ayuntamiento ha decidido sacar a la calle una campaña de información sobre "la forma más habitual de trata", la explotación sexual, que tiene en su "práctica totalidad" como víctimas a mujeres y niñas.

La iniciativa, ha dicho, busca "generar conciencia" y "crear una reflexión entre los vecinos" sobre esta "forma de esclavitud" que "afecta" a los compostelanos "de cerca", aún cuando "no se vea" por la clandestinidad de la actividad.

CARPA EN O TOURAL
La Praza do Toural de Santiago acogerá este viernes una carpa informativa en la que se proporcionará información y 'merchandising' sobre esta lucha, y que se aprovechará para difundir los recursos de los que dispone el ayuntamiento para apoyar a las víctimas a través del Centro de Información a la Mujer.

Santiago mantiene activo un convenio con Cáritas para, a través del programa Vagalume, asistir a mujeres en este tipo de situaciones. El programa atendió el pasado año en el municipio a 51 mujeres, de las que 35 pudieron "encaminar" su vida hacia "el abandono de la explotación sexual".

El perfil de persona asistida es el de una mujer joven, de entre 25 y 30 años, y extranjera. Además nacionalidades como República Dominicana o Brasil, los expertos apuntan al auge de víctimas procedentes de Venezuela.