La Praza do Obradoiro acoge este miércoles las protestas de la hostelería compostelana para "salvar al sector de la ruina"

La marcha saldrá a las 11 horas del Obradoiro y se dirigirá a la Xunta, a la que el sector reclama la reapertura e indemnizaciones para los afectados.

El gremio, uno de los más castigados por la crisis del coronavirus, señala que las medidas acordadas por el Gobierno de Galicia suponen el cierre definitivo de muchos negocios.

Protestas de hosteleros españoles por la crisis del coronavirus

Varias asociaciones de la hostelería de Santiago y O Milladoiro convocan un paro y una manifestación este miércoles 28 de octubre en busca de "soluciones reales" para "salvar al sector de la ruina" ante la crisis derivada de la pandemia del coronavirus.

Bajo el lema 'Paramos para abrir', la marcha saldrá a las 11,00 horas de la Praza do Obradoiro con destino a la sede de la Xunta en San Caetano, en contra de las "injustificadas medidas adoptadas por la Xunta contra la hostelería", las que entraron en vigor el pasado día 22.

Estas nuevas restricciones, advierten las asociaciones convocantes, "fuerzan al conjunto del sector de la hostelería de Santiago a convocar este paro".

Y es que, según subrayan, los diagnósticos del centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad son "claros" y los contagios en los establecimientos de hostelería "son residuales".

"Nuestro sector es un ejemplo a seguir en el combate a la pandemia, cumplimos escrupulosamente con todas las medidas higiénico-sanitarias", destacan.

Por ello, estas asociaciones lamentan estar "injustamente criminalizados" y aseguran sentirse "totalmente desamparados y sin ningún tipo de ayuda".

CONVOCANTES

Los convocantes son Asociación de Bares, Pubs e Discotecas de Compostela, Asociación Hostalaría Compostela, Tempo con xeito, Asociación da Raiña, Hosteleiros Asociados Compostelanos, Vicus Francorum, Hostaleiros do Milladoiro e Cidade Vella.

En concreto, piden la "inmediata" apertura del sector e indemnización por "el cierre impuesto", al tiempo que llaman a "la empatía" y la participación de "toda la ciudadanía".