El Club Fluvial de Lugo tendrá que eliminar una piscina en el cauce del Miño

El Club Fluvial de Lugo tendrá que eliminar una piscina infantil en el cauce del río Miño, "un pretil entre tierra firme y el río" y respetar la servidumbre del dominio público hidráulico.

Estas son algunas de las razones por las que la Confederación Hidrográfica Miño-Sil rechazó al Fluvial la concesión, al no tener en cuenta estas recomendaciones.

El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, José Antonio Quiroga, ha recordado en rueda de prensa --en la sede de este departamento del Ministerio de Medio Ambiente en Lugo-- que la concesión al Club Fluvial caducó en 2018 después de 20 años, mientras se le denegó la licencia una segunda vez por incumplimientos.

El "rechazo" vino dado porque "el proyecto no contempla la eliminación do obstáculos" y se mantienen "cerrados" los cinco metros de servidumbre que se han de respetar.

Ahora, se abre un proceso de "concurrencia competitiva" para acceder a la concesión, y se podría presentar cualquiera además del propio Club Fluvial que lleva trabajando en esa zona del Miño más de medio siglo.

Quiroga ha aclarado que "en este momento no hay concesión, se está tramitando la extinción y eso tiene un recorrido y unos procedimientos de cara a una hipotética tercera petición de concesión, que en cualquier momento se podría producir".

El presidente de la Confederación ha precisado que esas instalaciones se sitúan "sobre una hectárea de terreno", en concreto sobre 10.142 metros cuadrados en la ribera del río Miño.