Feijóo en la senda de Rajoy

El último curso político finalizó dejando en el escenario español una cierta sensación de que el señor Núñez Feijóo en su estrategia se está asemejando cada vez más a la del señor Rajoy. La razón de esta afirmación se apoya en la evidencia de su creciente querencia por las trolas (fake-news) y las insidias como armas políticas contra el contrincante, en este caso el gobierno español de turno (PSOE/UP). Una querencia que, como señalaba en el anterior artículo resulta muy del agrado de no pocos medios de información y comunicación, mayormente de aquellos que son conocidos popularmente como "la caverna mediática".

Una estrategia política que, cuando menos, es de dudoso éxito si tenemos en cuenta lo sucedido con el señor Rajoy, político que tiene el triste honor de ser, a día de hoy, el único que siendo presidente del Gobierno español fue cesado a causa de una moción de censura parlamentaria. Derrota política a la que contribuyeron tanto los incontables casos de corrupción de su partido (PP), en los que él mismo aparece involucrado, cuanto su gran desprestigio popular a causa de su constante querencia por las trolas (fake-news): según las encuestas del CIS Mariano Rajoy es, a día de hoy, el único presidente que nunca alcanzó el aprobado, comenzó la legislatura en un 4,5 y finalizó su mandato en un 2,5.

Con estos antecedentes, seguir la senda rajoiana puede ser para el señor Feijoó un ir cuesta abajo y sin frenos. Que su insólita fama de "buen gestor" de paso a la imagen de un político insolvente y frívolo, lo que sembraría una peligrosísima, para él, desconfianza e inseguridad en las propias filas (PP) al levantar viejos fantasmas (Rajoy, Casado...).

Una estrategia política que provoca continuos y muy sonoros patinazos, como pudimos comprobar recientemente cuando, con motivo de la presentación por la Ministra de Hacienda, la señora Montero, del techo de gasto para 2023, el señor Feijóo acusaba al señor Sánchez de "meter un soplo a cada español de 6.000 euros de deuda...el Ejecutivo no tuvo que cumplir ninguna norma económica al levantar los límites de déficit, deuda y regla de gasto lo que llevó a que el país esté endeudado por 300.000 millones". Patinazo que la inteligente ministra aprovecharía para dejar en evidencia a credibilidad del nuevo dirigente del PP con una respuesta tan contundente cómo certera. "Hablar en estos términos demuestra una total ignorancia y mala fe. Feijóo llegó la Xunta con una deuda de 3.954 millones de euros y la dejó en 11.314 millones. Según sus palabras, ¿dejó un soplo en Galicia de 7.360 millones de euros? El señor Feijoó es un insolvente y actúa de mala fe. Sigue queriendo engañar a los ciudadanos como siempre hace el PP cuando gobierna y cuando no. El último gobierno de Rajoy incrementó la deuda pública de España en un 46%. Son datos oficiales que el señor Feijóo debería conocer... Con el gobierno de Pedro Sánchez, España salió del procedimiento de déficit excesivo antes de la pandemia. Llevamos cuatro trimestres consecutivos rebajando la deuda pública y el año pasado lo cerramos con la mayor reducción de déficit de la historia". El patinazo fue, como se puede ver, monumental.

Pero no se trata del primero, he ahí que empeñar en esta estrategia permita pensar que el señor Feijóo miente deliberadamente (¿pueden ser sus asesores económicos tan incompetentes?). Porque anteriormente y con motivo de la distribución por el Gobierno español  de los fondos de recuperación económica acusó a aquel de partidismo, de privilegiar las comunidades autónomas gobernadas por los socialistas. Acusación que sería contundentemente rebatida por el gobierno con la presentación de los datos oficiales que demostraron, por caso, que en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) Galicia había recibido un poco más del 6% (el sexto mayor porcentaje) cifra que está por encima del peso de Galicia en población total del Estado. ¿Desconocían el señor Feijóo y sus asesores este dato?

Para finalizar, citar otro patinazo anterior cuando, en su estrategia de defensa de una bajada de impuestos -que sería suicida-, acusaba al gobierno español, en general, y a su presidente en particular, de "estarse forrando con el incremento en los precios de la luz y de la gasolina".  Argumento falaz que sería contestado debidamente en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) donde las autoridades responsables, de nuevo la señora Montero que está encontrando en las trolas del señor Feijóo un auténtico filón de popularidad, demostraría que, por caso, por el nuevo sistema de financiación autonómica Galicia recibirá casi 9.500  millones de euros (un 24% más que en 2002 y que será mayor cifra de la historia) gracias a previsión de ingresos por impuestos entre los que se incluyen aquellos con los que, según el señor Feijóo, el señor Sánchez se está forrando.

Patinazos tan grandes, recurrentes y repetidos no pueden ser fruto de la ignorancia de quien los comete que cuenta con muchos y notables asesores económicos. Cabe más pensar que son fruto de una estrategia política que tiene querencia por las trolas (fake-news) y las insidias como táctica. Una estrategia que sigue la senda marcada por el señor Rajoy y que, digan el que digan actualmente las encuestas y teniendo en cuenta el tiempo que falta para las próximas elecciones generales (diciembre 2023), de continuar practicándose no debería extrañar a nadie que conviertan al señor Feijóo en un político español de corto recorrido, tal y como le sucedió en su día al señor Hernández Mancha.