Así fue la fuga de un conductor reicindente el centro de Poio (vídeo)
El suceso registrado en Poio (Pontevedra) vuelve a poner de manifiesto la reiteración delictiva de algunos conductores en materia de seguridad vial. Un hombre de 43 años, con el carné retirado y un largo historial de antecedentes por delitos de tráfico, será investigado nuevamente después de protagonizar una persecución a gran velocidad por distintas calles del municipio tras desobedecer la orden de alto de la Policía Local.
Los hechos ocurrieron el pasado 24 de octubre, aunque se han conocido este miércoles, cuando el cuerpo policial difundió la información. Los agentes detectaron un turismo circulando de manera irregular por la calle Beiramar, una vía con prioridad peatonal y velocidad limitada a 20 km/h, donde no está permitido este tipo de conducción. Al comprobar la identidad del conductor, confirmaron que se trataba de un vecino de la zona ya conocido por sus numerosos antecedentes penales relacionados con delitos de tráfico, motivo por el cual decidieron interceptarlo ante la sospecha de que conducía sin permiso por pérdida total de puntos.
Sin embargo, lejos de detenerse, el individuo huyó a gran velocidad al percatarse de la presencia policial. La persecución se extendió por diferentes calles de la parroquia de San Xoán de Poio, durante la cual el conductor realizó maniobras extremadamente peligrosas. Según fuentes policiales, llegó a alcanzar velocidades de 95 km/h en tramos limitados a 30, adelantó en línea continua y ocupó carriles contrarios en curvas sin visibilidad, poniendo en grave riesgo la vida e integridad de otros conductores y peatones.
La Policía Local de Poio informó de que varios vehículos que circulaban en sentido contrario tuvieron que detenerse bruscamente para evitar una colisión frontal, lo que podría haber provocado un accidente de consecuencias fatales. Parte de la persecución fue grabada por las cámaras de los agentes, y las imágenes muestran claramente las maniobras temerarias realizadas por el fugitivo.
El seguimiento policial se complicó debido a la alta velocidad y al comportamiento imprevisible del conductor, aunque la inmediata colaboración ciudadana permitió rastrear parte de su recorrido. Finalmente, el hombre consiguió escapar de los agentes, pero al haber sido plenamente identificado, se formalizó una denuncia ante el juzgado de guardia de Pontevedra.
Los agentes le atribuyen tres delitos graves: conducción de vehículo de motor sin vigencia del permiso (por pérdida total de puntos), conducción temeraria con peligro para la vida o integridad de las personas y desobediencia grave a la autoridad. Estas infracciones, contempladas en el Código Penal, pueden derivar en penas de prisión y nuevas inhabilitaciones para conducir.
De acuerdo con los datos facilitados por la Policía Local, el sospechoso acumula más de una decena de condenas y antecedentes, la mayoría por delitos contra la seguridad vial. En el pasado ha llegado incluso a cumplir penas de cárcel por hechos similares, lo que refuerza la gravedad de su reincidencia. Los agentes señalan que su comportamiento evidencia un desprecio continuado por las normas de tráfico y por la seguridad de los demás.
El caso ha generado preocupación en el municipio, no solo por la peligrosidad de la conducción, sino también por la sensación de impunidad que transmiten reincidentes de este tipo. La Policía Local de Poio ha subrayado la importancia de reforzar los controles preventivos en las zonas urbanas y ha agradecido la colaboración vecinal, que fue esencial para identificar el vehículo implicado y facilitar la apertura de diligencias judiciales.
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