Trabajadores del sector naval de Vigo, unas 1.500 personas según fuentes sindicales, han salido a la calle este viernes para exigir mayores medidas de seguridad tras el fallecimiento de un operario de 42 años de edad que fue aplastado este jueves, 24 de noviembre, por un bloque de acero de grandes dimensiones mientras se disponía a realizar la descarga del mismo en el astillero vigués Cardama.
Se trata de la tercera revisión de la directiva sobre agentes carcinógenos y mutágenos e incluye una extensión de sustancias peligrosas, en industrias como la de la construcción, el papel o la madera,que pueden provocar cáncer nasofaríngeo, un tipo de cáncer de cabeza y cuello, y leucemia.
Yolanda Díaz advierte que "la precariedad mata" y remarca que los recortes revelan la "posición clara" del PP ante la siniestralidad laboral.