Stellantis Vigo recorta a otro provedor gallego, Opmobility Redondela, poniendo en solfa cientos de empleos

La planta de Stellantis en Vigo vuelve  agitar el tablero de la industria auxiliar gallega con la asignación de componentes del futuro Peugeot 2008 P1X, que se ensamblará en Balaídos a partir de 2028. El grupo automovilístico ha decidido dividir la producción de parachoques del modelo entre dos fábricas: la redondelana OPmobility (antigua Plastic Omnium) y la logroñesa Flex-N-Gate. La primera, que hasta ahora producía ambas defensas para el actual 2008, mantendrá solo la defensa trasera del vehículo, mientras que la delantera ha sido adjudicada a la factoría riojana.

La decisión se conoció justo antes del parón navideño y fue comunicada internamente a los cerca de 500 trabajadores de OPmobility según adelanta Faro.  Aunque la dirección de la planta había reconocido que el futuro del proyecto estaba en entredicho, esta resolución confirma una tendencia que preocupa al tejido industrial gallego: cada vez más encargos de Stellantis se marchan fuera de la comarca de Vigo.

Un panorama que se repite en la automoción gallega

No es la primera vez que Stellantis Vigo opta por reasignar parte de su cadena de suministro a otras comunidades. En los últimos meses, empresas clave como Denso Vigo o Grupo Copo también se vieron afectadas por cambios similares. Denso perdió la producción de climatizadores, aunque logró asegurar el suministro de bombas de calor. En el caso de Copo, sus tres plantas gallegas mantuvieron carga de trabajo con piezas de espuma y paneles acústicos, pero no sin incertidumbre.

Estos movimientos han generado preocupación sindical en el sector de automoción gallego. Desde las centrales de trabajadores se advierte que el “efecto dominó” de Stellantis puede poner en riesgo cientos de empleos indirectos en el área metropolitana de Vigo. Aunque la compañía defiende su estrategia como parte de un proceso global de optimización de costes y modernización tecnológica, los representantes laborales reclaman una mayor estabilidad y compromisos de inversión en Galicia.

La Xunta ha combinado presión política y ayudas económicas para tratar de frenar la deslocalización de proveedores vinculados a Stellantis Vigo. Al tiempo que defiende el peso estratégico de la automoción en Galicia, el Gobierno gallego ha reclamado a la multinacional que siga contando con la industria auxiliar de la comarca de Vigo en los nuevos contratos.

En octubre, la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, trasladó directamente a la dirección europea de compras de Stellantis que se tenga en cuenta a los proveedores gallegos en las futuras licitaciones, sobre todo las ligadas a la nueva plataforma STLA Small y a las furgonetas K9. En esa línea, la Xunta ha reconocido su “preocupación” por la pérdida de carga de trabajo en el área de Vigo y ha pedido a la compañía que evite desviar más contratos fuera de Galicia.

Para reforzar la competitividad y frenar la salida de contratos, la Xunta ha diseñado un plan específico de apoyo a la automoción que moviliza en torno a 230 millones de euros, de los que alrededor de 75 millones se dirigen a la industria auxiliar. Estas ayudas buscan reducir costes energéticos, financiar equipamiento y facilitar la adaptación a la transición hacia el coche eléctrico. Una de las beneficiarias es la factorái de Redondela ahora afectada por los recortes de Stellantis Vigo.

 

Flex-N-Gate: el nuevo socio en La Rioja

El traslado parcial de la producción a La Rioja beneficia a Flex-N-Gate, un gigante estadounidense fundado en 1978 por el empresario Shahid Khan. Con unos ingresos anuales de más de 9.000 millones de dólares y una amplia red industrial en Europa, la compañía cuenta en España con nueve factorías y un centro tecnológico. Su planta de Logroño, situada en Agoncillo, dispone de más de 360 trabajadores y una trayectoria de más de cuatro décadas en la fabricación de componentes plásticos para automoción.

Flex-N-Gate ha invertido en los últimos años en la modernización y ampliación de sus instalaciones riojanas, especialmente tras la adquisición de la antigua IAC Logroño. La compañía es, además, proveedora habitual de Stellantis y fue nominada este mismo año a los premios “Proveedor del Año” del grupo franco-italiano por sus aportaciones en innovación. Su incorporación refuerza los lazos entre ambas empresas a nivel global, pero reabre el debate sobre el papel que jugará Galicia en la cadena de valor del futuro Peugeot 2008.

Un futuro condicionado a nuevas adjudicaciones

En Redondela, la dirección de OPmobility había ya vinculado hace meses nuevas inversiones a la obtención de futuros pedidos del grupo automovilístico. Aunque mantiene parte de la producción para el nuevo SUV, reconocen que la pérdida del parachoques delantero reduce su volumen de trabajo y compromete la estrategia de modernización de la planta. 

Stellantis, que todavía no ha adjudicado todos los componentes del modelo P1X, prevé anunciar nuevas decisiones a lo largo de 2026.

La multinacional automovilística no ha hecho declaraciones públicas sobre el impacto regional de esta reasignación, pero fuentes sectoriales consultadas señalan que la deslocalización parcial de contratos es una tendencia cada vez más frecuente dentro del grupo.