Los casi 1.000 casos abiertos comunicados este viernes son sensiblemente más que los 769 del viernes pasado. Se confirma pues que estamos empezamos una fase de expansión que, lamentablemente, cada vez tiene más pinta de una nueva ola.
En cuanto la derivada de casos activos cruce la barrera del cero, significará que desde la perspectiva que importa, la semanal, empezamos a empeorar. Vista la evolución de la gráfica, esa mala noticia puede producirse esta misma semana.
Los casos abiertos del lunes y el domingo son prácticamente los mismos que los de la semana pasada. La transmisión sigue en una meseta, casi plana y con niveles altos.
Los datos de la covid-19 hoy en Galicia son, de nuevo, malos. No son como en las dos últimas jornadas al alza, pero desde luego la mejoría que venía experimentando la comunidad se ha esfumado prácticamente.
De confirmarse como parece que entarmos en una meseta de contagios, se puede estimar que las muertes por covid diarias en Galicia se estabilizarían en torno a 3,3 , unas 100 al mes.
Los 881 casos abiertos comunicados hoy son prácticamente los mismos que los del miércoles pasado. La transmisión sigue estancándose cuando aún está en niveles altos, con una tendencia semanal a la baja que es cada vez más imperceptible. De hecho, la incidencia a 14 días rebota por vez primera en medio mes.
Mayo se cierra con 148 muertes. En mayo de 2021 hubo solo 29. Es decir, en este mayo hemos multiplicado por más de cinco las muertes del año pasado. Ahora bien, vamos camino de estabilizarnos en una cifra de muertes que es, aproximadamente, una cuarta parte de la soportada en el peor momento de la pandemia.
El descenso de la transmisión de la covid-19 en Galicia está perdiendo cada vez más velocidad. En los índices de hoy destaca el 41% de PCR positivas, el tercer peor porcentaje de toda la pandemia.
Así lo parece, porque el máximo de muertes en un día (17) se comunicaron hace ya 11 jornadas y desde entonces las medias semanales y mensuales tienden a la baja.¿Qué podemos esperar de los próximos días? La transmisión debería seguir cayendo, aunque la mejoría empieza a dar algunos síntomas de agotamiento y es probable que, antes de la siguiente ola, nos instalemos en alguna meseta.
Con tantos positivos, son decenas de miles de personas las que acaban desarrollando covid persistente, algunas de las cuales se están organizando en un nuevo colectivo. Entrevistamos a una de los portavoces de la nueva Asociación Long Covid Galicia, Lucía Estrada Csaky. El colectivo rechaza el alarmismo, pero cuestiona decisiones como la retirada de las mascarillas en interiores. El perfil típico de los pacientes de este síndrome -donde hay más mujeres-, las carencias del SERGAS para abordarlo, los posibles tratamientos y las reinfecciones son otros de los temas de esta conversación.
Nueve muertes comunicadas hoy elevan el cómputo de los últimos tres días a 26, el de la semana a 45 y el del mes a 150. Es decir, como sigamos al mismo ritmo de este último mes, morirán cada año unos 1.825 gallegos con coronavirus.
El freno de la transmisión aún no ha valido para hacer caer la presión hospitalaria, pues hay 26 hospitalizados en planta más que el pasado miércoles, aunque sí para aplanarla.
Las noticias de la curva de decesos no son buenas, con 8 fallecimientos comunicados hoy. La media diaria de fallecimientos en el último mes ronda los 5 decesos por jornada. La situación es muchísimo peor que hace un año, pues en mayo de 2021 las muertes no llegaban a una la día.
Los 1.541 casos abiertos comunicados este viernes son un 12% menos que los comunicados los dos últimos viernes, aproximadamente. Ayudan, por lo tanto, a que los índices de transmisión sigan el lento descenso que empezaron esta semana.
La leve caída de la transmisión nos da esperanzas de haber conquistado el pico de esta ola. Esperanzas que se ven refrendadas por un considerable frenazo de las hospitalizaciones. Desde el punto de vista semanal aún estamos empeorando, pero muy poco, solo hay un ingresado en planta más que el pasado jueves.
En el campo de las defunciones hay buenas noticias. Ni ayer no hoy se comunicó ningún óbito. No hay que echar las campanas al vuelo porque puede ser resultado de la falta de transmisión de datos el fin de semana, pero es algo esperanzador, que no conseguíamos desde noviembre del año pasado. Sigue produciéndose el curioso fenómeno ya detectado la semana pasada, caen las defunciones sin que hayan caído antes las hospitalizaciones.